domingo, 12 de junio de 2011

TIPOS DE PIRATERIA


-Piratería comercial: DVD, CD, ropa, zapatillas (estas ultimas dos cosas mencionadas, son pirateadas, por la marca del producto por eso piratean, así hay personas que dicen mira tengo esto de tal marca y así), Video- casettes, joyas, etc.
La piratería comercial se ha convertido en nuestros días en un fenómeno de dimensión internacional cuyo impacto sobre el comercio mundial es bien conocido.
Las consecuencias económicas de la piratería de mercancías repercuten sobre los fabricantes de los productos originales (disminución en las ventas, pérdida de imagen, gastos que entraña la persecución legal, demandas injustificadas de responsabilidad por los productos), sobre los consumidores (falta de calidad en los productos, falta de seguridad, elevación en los precios de los productos originales) e incluso sobre el Estado (pérdida de ingresos fiscales, pérdidas en puestos de trabajo).
Los productos piratas se benefician de las posibilidades que ofrecen unas condiciones de producción que no tienen que soportar costes de desarrollo, gastos publicitarios, regalías o los costes derivados de la pruebas de seguridad. El resultado es la pérdida de confianza de los operadores del mercado interior y esa pérdida lleva consigo un descenso de la inversión y del esfuerzo de innovación y creatividad en las empresas.


Piratería informática: piratean programas de computación, juegos, música, etc. También están los hackers que se dedican a entrar a las maquinas para ver información, sacar datos, etc., pero lo hacen por cuenta propia.
La piratería informática consiste en la distribución y/o reproducción ilegales de software. Comprar software significa en realidad comprar una licencia para usar el software, y esta licencia especifica la forma legal de usar dicho software. Cualquier uso que se haga del software más allá de lo estipulado en la licencia constituye una violación de ésta y posiblemente, de las leyes que amparan los derechos de propiedad intelectual. La piratería informática es ilegal y sancionable según la ley, tanto si es deliberada como si no.

LA PIRATERIA DE MUSICA FONOGRAFICA

Se dice que la piratería es un fenómeno complejo, y como se ha multiplicado en los últimos 5 años, ha provocado innumerables efectos negativos en la industria  fonográfica, según ha declarado AMPROFOM (Asociación Mexicana de Productores de Fonogramas), la cual agrupa al 80% de las principales disqueras en México, y que  afirma que las principales productoras afectadas son EMI MUSIC, SONI BMG, WARNER MUSIC, UNIVISION MUSIC y UNIVERSAL.

Dicha asociación sostiene que la culpable de esta crisis es la Piratería, aunque en opinión de algunos medios informativos y algunas personas dedicadas al periodismo opinan que la culpable de estas perdidas no es otra cosa mas que la propia  ambición de los ejecutivos de dichas  empresas, por no tener  una visión mas exacta de lo que le gusta al publico, aunado a la falta de talentos que estas producen; parece ser que están totalmente desconectados de los gustos de la gente, y eso se hace notar en el alto crecimiento de las estaciones “clásicas” o de música de los años 70s y 80s.

Por otro lado, no se debe dejar de pasar el hecho de que la industria ilegal cuenta con el apoyo de complejas organizaciones criminales y con la ayuda de otras organizaciones que incluso operan desde adentro  de algunas compañías discográficas, como es el caso del crítico de cine que fue sorprendido vendiendo películas a piratas.

Entre el mas típico de los ejemplos en lo referente a la piratería, indudablemente es el Barrio de Tepito.     

El mercado de Tepito se caracteriza principalmente por expender productos ilegales ya sean de contrabando, falsificados o robados. Tepito es un mercado negro en todo el sentido de la palabra que opera a la luz del día y bajo el ojo cómplice/tolerante de las autoridades para beneplácito de los habitantes de la Ciudad de México...

La rigidez en las aduanas mexicanas y los altos impuestos se contrarrestaban con el contrabando, con la introducción al país de mercancías sin pagar impuestos y sin respetar las restricciones y los cupos de importación vigentes.

A la mercancía que ingresa al país sin pagar impuestos y sin respetar las restricciones y los cupos de importación vigentes se le conoce popularmente como FAYUCA y por extensión a los contrabandistas se les denomina fayuqueros.


A los productos falsificados se les conoce popularmente como PIRATAS. Así hay discos piratas, películas piratas, pantalones piratas, tenis piratas, licenciados piratas  -vean el caso de Miguel Osorio Chong, gobernador electo del estado de Hidalgo-, etc. No se debe confundir un producto pirata con un producto patito. Un producto pirata es un producto falsificado, un producto patito es un producto de mala calidad. Así hay productos originales patitos y productos piratas de excelente manufactura

Problema:

(2006) Los últimos datos sobre la piratería musical en  México son alarmantes: ocupa el tercer puesto en la clasificación mundial de países con más volumen de mercado musical ilegal. Por delante se sitúan China y Rusia (en China el 90% de las copias que se venden son ilegales). El Sudeste asiático y Europa Oriental (sobre todo Ucrania) son las principales zonas exportadoras de productos ilegales. En México no ha habido de momento ninguna detención de exportadores de piratería musical a Europa o a EEUU, según ha informado a América económica el director jurídico de la Asociación Mexicana de Productores de Fonogramas (Amprofon), Arturo Díaz. En Paraguay sí se han detectado focos de mafias que importan y exportan a otros continentes.

La primera reflexión debe llevarnos a que además de su valor intrínseco, su capacidad de dar relevancia y esperanza a todo lo largo de la vida y ser la base de nuestras identidades, la cultura es un sector fundamental de la economía de México y en especial de la Ciudad de México, el 7.8% del PIB. Por lo tanto, los recursos e iniciativas que se le dediquen no deben ser los remanentes del presupuesto, ni las apostillas de la discusión parlamentaria. Así lo entienden las grandes ciudades como París, Taipei, Tokio o la capital del Reino Unido, que ha definido la Creatividad como “el negocio central de Londres” y ha identificado las industrias creativas como un sector prioritario para su economía, que aporta $21 billones y emplea a más de 500 mil personas. El futuro económico de la Ciudad de México está también ligado a las industrias creativas y las estrategias para apoyarlas deben ser prioritarias para nuestra Asamblea de Representantes. Como primer elemento se suele citar la piratería.

Es verdad que México tiene uno de los primeros lugares mundiales en piratería de audio. Según cálculos conservadores se pierden unos mil millones de pesos anuales. Ese dinero no sólo lo pierden las industrias creativas, en primer lugar las disqueras. Lo perdemos todos: autores y compositores, intérpretes, productores, ingenieros, tiendas y por supuesto el erario público.

Pero como publicó Reforma el pasado día 6: “La mayoría de las empresas afectadas por la piratería en México prefieren simplemente ignorar la invasión de su marca o la violación de sus derechos de autor, ante lo costoso, complicado y lento de los procesos legales que operan en el país”. Juan Ramón Obón, coordinador de la Comisión de Propiedad Intelectual de la Barra Mexicana de Abogados dijo: “Las compañías deben sufrir procesos de hasta cinco años para defenderse legalmente de la piratería”. El costo en tiempo y en recursos financieros es imposible de asumir para una gran parte de los afectados. La pérdida en el PIB por concepto de piraterías asciende a casi el 2%. ¿Cómo es posible que el Estado no actúe con mayor energía? A tres pasos de esta Asamblea, calle tras calle del Eje Central, innumerables puestos de discos piratas prosperan al lado de policías que se fuman un cigarrito. La omisión es en este caso complicidad y si bien el delito es de la competencia federal, todos deben combatirla.

El segundo punto de apoyo a la industria es lo que se llama la excepción cultural, las leyes que rigen en México el comercio de cualquier bien de consumo son las mismas que aplican a los productores de las llamadas industrias culturales, o sea a nosotros. En muchos otros países, especialmente Francia y veladamente hasta en los Estados Unidos, se hacen grandes diferencias. En el contexto mexicano no hacerlo es un disparate. Hay dos posiciones opuestas ante los productos culturales, la neoliberal que deja todo a las leyes del mercado y la que propone una intervención pública para “corregir” esas “fallas del mercado”. Es por eso que se ayuda a la agricultura, a la salud pública o a la educación.

¿Por qué no se establece y aplica una política que favorezca a las industrias culturales? Francia, Italia, España y el Reino Unido lo hacen. Veamos como ejemplo cuál es la política cultural del Reino Unido, a diferencia de los Estados Unidos, donde la filantropía juega un papel central en el ámbito cultural. En el Reino Unido, como en México, el quehacer cultural depende en gran parte del sector público.

En los últimos cinco años, el Reino Unido ha encontrado cuatro ejes prioritarios para su política cultural que es muy escueta y clara:

1). Excelencia. La necesidad de promover y subvencionar lo mejor de las artes y la cultura
2).  Acceso.  El deseo de que la mayor cantidad de personas tengan acceso a lo  mejor de la cultura.
3). Educación. La necesidad de asegurar que tanto en las escuelas como fuera de  ellas, a todo lo largo de la vida, la creatividad artística juegue un papel central en lo que se ofrece como una “experiencia de aprendizaje”.
4).  La Economía creativa. El reconocimiento de que la creatividad y las empresas que se nutren de las ideas creativas juegan un papel vital, y cada vez mayor en la economía nacional. (Aquí quiero hacer referencia al estudio de Ernesto Piedras del CIDE, que identifica un 7.8% del PIB de México en la Cultura y le otorga el tercer o cuarto lugar como sector productivo).


ALCANCES Y LIMITACIONES.

Estas estadísticas forman parte de los alcances que tuvo la investigación y que evidencian el impacto que tiene la piratería para el país y las industrias más afectadas.


ÍNDICES DE PIRATERÍA
> Industria Fonográfica (musical): 85%
PÉRDIDAS AL FISCO NACIONAL POR PIRATERÍA
> Industria Fonográfica (musical): 18.500 Millones
PÉRDIDAS ECONÓMICAS POR PIRATERÍA
> Industria Fonográfica (musical): Bs. 117.000 Millones
PÉRDIDAS DE EMPLEO POR PIRATERÍA
> Industria musical: 14.000 empleos.


Los Países Que Más Música Roban

1. Brasil
2. China
3. MÉXICO
4. Paquistán
5. Paraguay
6. Rusia
7. España
8. Taiwán
9. Tailandia
10. Ucrania

Asimismo se ubicaron las empresas discográficas que se encuentran entre las  más  afectadas, siendo estas las  siguientes:

TRES MEDIDAS

En principio es indispensable modificar el sistema legal, es decir que no sea un delito que se persiga por querella o denuncia previa, esto significaría que el propio Estado Mexicano, actuara de oficio. En la  actualidad, sólo el titular del derecho debe presentar una querella o denuncia, de otra forma no hay averiguación.

Al igual que en otros países del mundo, es necesario crear comandos especializados de policía, bien pagados y entrenados, que sepan de piratería, pues el modo de operación en que trabajan es mediante redes amafiadas, similares al narcotráfico, perfectamente equipadas y comunicadas. Para combatirlas, se necesitan investigaciones sistemáticas y científicas. No se puede improvisar con investigadores que antes se dedicaron a resolver homicidios o delitos forestales; necesitan aprender y conocer el fenómeno de la piratería, cómo y dónde opera, las rutas que escogen y cómo se mueven estos grupos, ya que la piratería funciona entre países, en algunos casos se importa y en otros se exporta. El tercer punto, consiste en modificar la legislación para que exista una especie de certificación de legalidad de mercancía, es decir exigirle a quien vende bienes en la vía pública un permiso o autorización de mercancía; de no tenerlo, las autoridades podrían decomisar dichos bienes hasta que se aclare el incidente, ello evitaría la corrupción y dejaría de afectar los eslabones de la cadena, que finalmente son reemplazados como los vendedores, distribuidores o encargados del depósito hasta llegar con los peces gordos., etc., pero lo hacen por cuenta propia.